miércoles, 11 de enero de 2017

El misterio de "algo" que viaja en el tiempo


<PUBLICADOE EN LA GACETA DE CANARIAS EL 29/08/1993>
<PAGINA>: LA OTRA PALABRA
<TITULO>: Misterio de "algo" que viaja en el tiempo
<SUBTITULO>: La regresión como terapia
<AUTOR>: Alfiar
<SUMARIO>: "El verdadero fundamento de la teoría del Renacimiento es la evolución del Alma." Srí Aurobindo.
<CUERPO DEL TEXTO>


A finales de Mayo del presente año y con motivo de unas conferencias que dieron en Tenerife, conocí a Luís Antonio Sánchez González, psicólogo y psicoterapeuta transpersonal, y director de la "Red de Experiencias psico-espirituales" (REP) y a su mujer Carmen Alcorta Luengo, doctora en medicina y cirugía y con cinco años de trabajo en la práctica de regresiones. Me parecieron dos personas sencillas, amables, poseedoras de un gran encanto personal y de un profundo conocimiento y experiencia en lo que se refiere al mundo de la conciencia y del espíritu.
(...)

Al finalizar la charla y en días sucesivos tuve la oportunidad de conversar, en forma más amigable, con ellos e incluso de someterme a una regresión según un método de relajación profunda que ellos practican y en el que no se pierde la conciencia. Puedo asegurar que a pesar de mis recelos ante este tipo de prácticas quedé profundamente impresionado.
En una de las conversaciones que mantuvimos me interesé por un proyecto de Luís, la REP (Red de Experiencias Psico-Espirituales). Me informó que era un proyecto surgido en 1991 como respuesta a la gran demanda de un gran número de personas que en los últimos años están experimentando estados alterados o no ordinarios de conciencia, también de crisis psico-espirituales y de procesos transformadores de lo que él llama emergencias espirituales. Añadió que la REP está asociada a la Spiritual Emergence Network que en 1980 crearon en California Cristina y Stanislav Grof.
Parte de su trabajo es ofrecer servicios de información y asistencia a personas que experimenten estados no ordinarios de conciencia. Como ellos viven generalmente en Madrid, ante mi interrogante de si era necesario trasladarse allí para acceder a la consulta, señalaron que también podía hacerse a través de llamadas telefónicas desde cualquier lugar.
La REP permite poner en contacto a personas que están pasando por una experiencia psico-espiritual, con otras que han vivido procesos similares. Con ello se puede acceder a un principio de respuesta e información de lo que está pasando, además de asistencia profesional psicoterapéutica.
Pero el tema que más atrajo mi atención, sobre todo por haberme visto inmerso en una experiencia, fue el de la regresión. ¿Es posible llevar la conciencia presente al recuerdo de otras vidas pasadas? ¿Demostraría este hecho el tema de la reencarnación? Son estas dos preguntas básicas que se plantean siempre y que, dado el carácter subjetivo de la experiencia, nadie parece poder demostrar. De todas formas, lo que acontece en el nivel subjetivo de la propia experiencia es difícil de olvidar, por su profundo contenido vital, por la claridad de lo percibido y sentido, por algo que sin saber lo que es te conmueve y estremece.
Uno de los problemas que se plantea al tema de las vidas pasadas, o al de la pervivencia de los seres en un más allá, sobre todo desde el lado del budismo, es que la personalidad no sobrevive a la muerte. A este respecto, y apoyándome en mi experiencia de regresión y en otras experiencias pasadas en las que por una distorsión del espacio-tiempo pude ponerme en contacto con otra personalidad de mi ser en el pasado, puedo conjeturar que no es la personalidad la que permanece, sino ese algo que viajaría a través de las encarnaciones y las personalidades que construye en ellas.
Sri Aurobindo pone de relieve el hecho de que el renacimiento no consiste simplemente en la adopción de un nuevo cuerpo por parte de la misma personalidad. Ya que "el verdadero fundamento de la teoría del renacimiento es la evolución del alma".
Entiendo que nuestra vida presente no es un hecho aislado que acontece en forma inexplicable sin un antes y un después. Es uno de los múltiples episodios que vive el alma en su proceso progresivo de ascenso por la escala de la evolución espiritual, y que nos conduce de la ignorancia al conocimiento, de la oscuridad a la Luz. Esta Luz o Divinidad es la meta del viaje del alma humana en el devenir del Cosmos. Para alcanzarla, el alma debe asumir una serie de nacimientos con el fin de utilizar las experiencias de cada vida para su formación y desarrollo espiritual.
Desde esta óptica entiendo que el Renacimiento es un proceso y que el Karma es el medio a través del cual el alma desarrolla plenamente sus posibilidades en el devenir cósmico.
En un precioso libro llamado "Tierra de Esmeralda", Anne y Daniel Mourois Givandan nos relatan sus experiencias de viajes en el plano astral. En una de ellas, un ser que actúa de guía para ellos en ese "Más Allá" y referente a este tema que comentamos les dice:
"las existencias en la tierra preparan las existencias en el astral y viceversa, hasta alcanzar cierto grado de perfeccionamiento que suprima la cadena de los renacimientos... Este lugar no es sino el punto de partida de los seres que se disponen a volver hacia un mundo de materia densa, hacia un mundo donde tomarán otra apariencia, otra personalidad, otras cualidades... Todo ello tiene un fin: multiplicar hasta el máximo el número de experiencias, fortificar cada alma para hacerla invulnerable a todo lo que revista una forma de pensamiento negativa".
En otro momento de la experiencia les señala que
"el alma no tiene forma ni dimensión específicas. Sólo tiene la forma que quiere tener... El alma es una energía voluntaria y consciente, de forma que es ella quien crea y modela su propio aspecto físico..., y cada cual adopta la imagen que quiere ofrecer de si y en la que se encuentra a gusto."
Raymond Moody, a pesar de su escepticismo inicial, se sometió a una serie de regresiones y tal fue el impacto de lo vivenciado que inicio un proceso de investigación al respecto. Aunque no pudo concluir que lo experimentado en la regresión sea la vivencia de una vida pasada, si pudo comprobar que desde el punto de vista terapéutico lo experimentado servía para ayudar y sanar problemas psicológicos, depresiones, angustias, fobias...
Se acusa a estas prácticas de mágicas, de supercherías. Yo pienso que cualquier técnica o tecnología, si es lo suficientemente avanzada para su momento histórico, es indistinguible de la magia. De cualquier forma, aunque el tiempo vaya mostrando su utilidad, mucho de lo que se dice en relación a este tema, ya sea acogiéndose al escepticismo de la Ciencia o a la creencia o no creencia sobre ello, no deja de ser tan subjetivo como la propia experiencia. Pienso que es en ella misma donde está lo importante para cada uno. ¿Por qué esa extraña obsesión de querer demostrar las cosas? Uno está seguro de las cosas cuando las experimenta.
A este respecto un hombre joven acudió a un rabino y le dijo:
- He perdido la fe.
- Bien -dijo el rabino-, ¿cómo has perdido la fe?
- Estudie lógica en la Universidad y descubrí que puedes probar cualquiera de los dos aspectos de un argumento si eres lo suficientemente listo.
- Entiendo -dijo el rabino-. ¿Puedes probar que no tienes nariz?
- Por supuesto -respondió el estudiante-. Se empieza con...
Pero en ese momento el rabino le propinó un fuerte puñetazo en la nariz rompiéndosela.
- ¿Qué es lo que te duele?, -preguntó solícito el rabino.

Siempre me he preguntado que queremos decir cuando decimos, sin creer en ella, que nos duele el alma, que se nos ha roto el alma. ¿Nos habrá pegado algún rabino un fuerte puñetazo en ella?
A partir del lunes día 6 de Septiembre Luís Antonio Sánchez González y Carmen Alcorta Luengo estarán en Tenerife para realizar regresiones a personas que lo necesiten


No hay comentarios:

Publicar un comentario